SES suministra conexiones de banda ancha a medios de transporte con satélites a 8.000 kilómetros de altura
En otros tiempos, parecería temerario adentrarse en alta mar sin un sextante para orientar la navegación. Hoy en día, lo que preocupa a los pasajeros de los colosales cruceros es zarpar sin una conexión fiable de alta velocidad que les permita navegar por Internet, utilizar el correo electrónico o subir fotos a las redes sociales. Bajo esta premisa, la Sociedad Europea de Satélites (SES) ha puesto en órbita una constelación de satélites situados a 8.000 kilómetros de altura sobre la órbita del Ecuador que permite ofrecer servicios de banda ancha a barcos y también a aviones y trenes de alta velocidad que circulan por zonas desérticas.
Con la conectividad que proporcionan estos satélites se da respuesta a la creciente demanda en los medios de transporte. Las grandes navieras de cruceros turísticos están implantando el wifi a bordo como una prestación más y otro tanto están haciendo las compañías aéreas. Aunque la inmensa mayoría de los pasajeros se ven obligados a activar en sus dispositivos el modo avión, cada vez más aerolíneas ofrecen wifi (algunas incluso gratis).
Tan complejo como ofrecer cobertura móvil en vuelo es hacerlo en el mar. A cientos de kilómetros de la costa, la señal de las antenas terrestres desaparece y la conexión se apaga. Cruceros de lujo, buques de transporte de mercancías o plataformas petrolíferas han encontrado en el satélite un instrumento eficiente para acceder a conexiones de voz y datos

